NARUTO - EL NIÑO QUE QUERÍA SER HOKAGE


Uno de los grandes shonen de nuestro tiempo. Obra creada por el mangaka Masashi Kishimoto y serializada en la revista Weekly Shonen Jump de la editorial Sueisha a partir de 1999, esta obra se acabó recopilando en 72 volúmenes tankobon. Se volvió muy polular, contando con su propio anime y conocida como uno de los 3 grandes shonen en su tiempo junto con Bleach y One piece, obras serializadas en la misma revista. Dio el salto al mundo de los videojuegos con mucho éxito y se publicaron varios novelas sobre este universo, amen de varias películas de animación y hasta obras de teatro. En Japón hay incluso un parque dedicado exclusivamente a esta obra.

La historia nos narra la vida de Naruto Uzumaki, un niño huérfano al que no sabe muy bien por qué todos repudian y se siente muy solo, hecho por el cual realiza gamberradas para así llamar la atención y que alguien le haga caso. Es en el primer número cuando ya nos enteramos de que Naruto tiene sellado en su interior a Kurama, el bestial zorro de 9 colas que asoló Konoha, su villa oculta, cuando nació.
El personaje se acaba uniendo a dos personajes a los que se vinculará mucho, sobre todo a uno de ellos, llevando la verdadera amistad a límites insospechados. Se trata de Sakura Haruno y Sasuke Uchiha. Aunque la obra se titula Naruto y en primera instancia éste es el protagonista vemos como poco a poco su compañero Sasuke también llega a cobrar mucha importancia en la obra.
Tras una primera aventura emocionante y emotiva comienza una etapa la cual consiste en realizar un examen para subir de categoría. Pero son ninjas, por lo que el examen no es un examen cualquiera. Poco a poco Naruto irá evolucionando en la obra, ya no sólo en poder y capacidad sino que veremos como el niño trasto del principio de la obra va madurando y adquiriendo responsabilidades hasta desembocar la obra en un final apoteósico lleno de batallas, sacrificios y, como nos tiene acostumbrado este estilo de mangas de acción, muchos poderes impresionantes y peleas largas y vibrantes.
El concepto que más se remarca en la obra es el de la amistad. Tanto en la unidad de un pueblo y sus habitantes frente a los peligros y adversidades que acechan en la obra como en la estrecha amistad que se forja, no sin grandes dificultades entre el protagonista y su compañero Sasuke.
La obra bebe bastante del folklore japonés, tanto para la creación de ciertos personajes como en el uso de cierta mitología, y el nombre de ciertas habilidades.
Naruto demuestra ser una obra bien contada, con mucha acción pero también con bastante drama. Crea personajes muy heterogéneos y los tridimensonaliza, ves sus vidas, sus acciones, entiendes el por qué de muchas de las acciones. El manga crea unos villanos con los que puedes llegar a empatizar, no todo es blanco o negro sino que hay varios grises intermedios. Ves sus traumas y sus vivencias, y te deja comprender un poco más sus actos, estés de acuerdo con ellos o no. Incluso alguno de los villanos llega a tener su redención.


Personalmente diriía que el último arco tal vel lo alargaron demasiado, pero es disfrutable igualmente. Y no termino de entender en ciertos momentos ciertos comportamientos, como los de Sasuke, pero eso no significa que esté mal construido el personaje. Mención especial al hermano de éste, Itachi Uchiha, un claro ejemplo de la buena construcción de personajes que tiene esta obra. Es probablemente el personaje favorito de muchos de los amantes de esta obra. Hasta tal punto que llegaron a publicar dos novelas sobre este personaje.
Naruto ha acabado teniendo una continuación protagonizada por su hijo Boruto, serializada en la misma revista.
